El buen buscador de trabajo es una persona proactiva, perseverante, paciente y metódica. Es proactiva porque no espera que el trabajo llame a su puerta, sino que sale a buscarlo. Es perseverante porque no se deja vencer al mes de haber emprendido la búsqueda; y es paciente porque sabe esperar su momento. Según la OIT y dependiendo del país, se tarda una media de 12 meses en encontrar trabajo.
El buen buscador de trabajo, también, debería ser metódico y tener a mano una lista (o varias).
Esta lista debería contener dos partes. En primer lugar, esta lista debe tener todos los puntos que aparecen en el artículo de Cómo empezar a buscar trabajo. Por otra parte, tendría que registrar una descripción de todas las ofertas a las que nos hemos postulado y todas las razones por las que creemos que somos el candidato ideal.
En efecto, no debemos postularnos a todo, sino en aquellas ofertas que cumplan con nuestro perfil. Además, es importante anotar en qué punto estamos y cómo nos está yendo en cada proceso en concreto.
Organizar la búsqueda de trabajo: ¿de qué tengo que tomar nota?
- Anotá una descripción comercial de la empresa que se ha interesado por vos.
- Buscá otros trabajadores y comprobá cuánto tiempo llevan en el puesto. Esto te dará una idea de si la rotación es alta o baja, un dato muy importante que te puede ayudar a tomar la decisión de seguir o no adelante con el proyecto y también te ayudará a realizar preguntas durante la entrevista. Es muy importante para tu carrera que el ranking de Employer Branding de la empresa a la que querés aplicar sea alto.
- Puntuá la reputación digital de la misma y cuán fuerte es su marca. ¿Te interesa asociar tu nombre con dicha marca?
- Anotá el nombre de la persona que te entrevista y también su cargo. Interesate por el número de pasos que tendrá el proceso de selección antes de que la empresa haga una oferta.
- Escribí claramente las tareas claves que tendrás que desarrollar y que te describa el entrevistador. Preguntá por el día a día.
- Al finalizar cada uno de los contactos o interacciones que tengas con la empresa y sin dejar pasar demasiado tiempo, describí las impresiones que te ha dado tanto el entrevistador como persona y compañero de trabajo, como el desarrollo de la entrevista en sí.
- Hacé una pequeña lista, una vez sepas cuáles van a ser tus responsabilidades y las habilidades requeridas describiendo en cuáles sos más fuerte y en cuáles más débil. Te ayudará a enfrentarte a la siguiente entrevista.
- Si estás en varios procesos a la vez, compará tus anotaciones para los diferentes puestos a los que postulás.
- Antes de tomar una decisión, comprobá que el puesto al que vas a decir que sí concuerde con lo diseñado por vos en tu plan de carrera.
- Tomes la decisión que tomes, agradecé el tiempo que el entrevistador o entrevistadores han pasado con vos, a través de un email.
Quizás, te parezca exagerado tomar notas de todo, pero haceme caso: un proceso de selección rápido no dura menos de tres semanas, y puede durar aún más. Puede pasar, si estás en un par de procesos en paralelo, los que asimismo son lentos, que te olvides de algo o peor, como por ejemplo que manipulés las sensaciones que tuviste en cada paso y te equivoqués al tomar una decisión.
Si este artículo sobre la organización laboral te ha sido útil, te invitamos a que sigas leyendo otro de los tantos artículos del blog de CompuTrabajo o revisá las ofertas de empleo que tenemos ahora disponibles.